POR TANIA APAZA
Recientemente se han compartido más videos sobre Venezuela en las redes sociales, no solo por la BBC, The Guardian y otros medios de comunicación, sino también por los medios de comunicación que se presentan como fuentes alternativas de información. O más bien, desinformación.
Esta desinformación generalmente se difunde al proporcionar un testimonio puramente emocional y descontextualizado, usualmente acompañado de música dramática y triste que evoca las emociones de los televidentes. O en algunos casos es una diatriba sin sentido que enumera las cosas horribles que atraviesan las personas del país sin ningún contexto.
Sin mencionar el hecho de que las protestas en curso están siendo financiadas por las potencias imperialistas y dirigidas por la elite del país, una élite que ha sido responsable de siglos de pobreza que el Partido Socialista Unido de Venezuela, o PSUV, ha estado tratando de aliviar desde que llegó al poder. La única razón por la que las personas tienden a tomar en serio este tipo de videos es porque la persona es venezolana.
¿Pero adivina que? Alguien que tiene un pasaporte venezolano no significa automáticamente que todo lo que dicen sobre el tema sea legítimo o correcto.
Un ejemplo perfecto de este tipo de propaganda imperialista es el reciente video de Pero Like de la defensora de la oposición Joanna Hausmann gritando sobre lo “terrible” que es el gobierno y cómo ella no sabe por qué Venezuela está pasando por lo que está pasando en este momento porque “se le dio justo … todo lo posible para que sea un país asombroso.”
Parece que debe atenerse a la comedia o lo que sea que haga, porque cuando se trata del análisis político es horrible.
O tal vez su ignorancia le conviene y está tratando deliberadamente de desinformar al público. Después de todo, ella es la hija de Ricardo Hausmann, ex-Economista Jefe del Banco Interamericano, ex-Ministro de Planificación de Venezuela y actual Director del Centro para el Desarrollo Internacional. Probablemente no sea la mejor idea confiar en la opinión de alguien cuyo padre es directamente responsable de la insoportable pobreza que los venezolanos enfrentaron antes de que el ex-Presidente Hugo Chávez llegara al poder.
Por supuesto, esto no vale la pena mencionarlo en su video ya que, al menos en ese momento, el gobierno estaba cumpliendo con los paquetes económicos neoliberales que les entregaba el FMI lo que permitía a las élites de Venezuela tener la libertad de vivir de las espaldas de las masas pobres.
Se queja acerca de la escasez de alimentos y medicinas omitiendo convenientemente el hecho de que almacenes de alimentos y medicinas acumulados, propiedad de las élites de Venezuela, han sido encontrados por el gobierno. Grita sobre el problema de la inflación sin mencionar que Venezuela enfrenta una guerra económica en la que los élites están haciendo los productos escasos lo que aumenta el precio de estos productos y hace que la moneda sea menos valiosa.
Ella repite una mentira descarada alegando que el gobierno es una “dictadura violenta”, eludiendo la evidente verdad de que el presidente Nicolás Maduro es un presidente elegido democráticamente y que la mayoría de las muertes a lo largo de estas violentas protestas han sido el resultado del los violentos manifestantes antigubernamentales.
Otra repugnante mentira que regurgita es que Chávez empeoró la pobreza y la corrupción después de llegar al poder. El hecho de que el porcentaje de hogares del país que viven en la pobreza pasó del 55 por ciento en 1995 al 26,4 por ciento en 2009 socava por completo su argumento.
Además, aunque la corrupción sigue siendo un problema en Venezuela, no es algo que pueda adscribirse simplemente al socialismo o al PSUV. Es un síntoma del sistema capitalista innatamente injusto, algo que Chávez desafió. El actual presidente frecuentemente despide a funcionarios del gobierno al descubrir que han violado la ley.
No es difícil descubrir la verdad sobre lo que está sucediendo en Venezuela; lo único que se necesita es una breve mirada a medios de comunicación genuinamente alternativos como teleSUR y Venezuela Analysis. Medios de comunicación que no están siguiendo la línea imperialista y apoyando el derrocamiento de un líder elegido democráticamente.
Un líder que, al igual que su predecesor, solo ha tratado de liberar a la población de su país de paquetes económicos injustos de extranjeros del Primer Mundo y los elites domésticos codiciosos. Al mismo tiempo, un líder que intenta derrocar la dinámica colonial actual con el alivio de las condiciones difíciles de la masas negras, indígenas y mestizos.
Después de investigar un poco sobre lo que realmente está pasando en Venezuela es bastante difícil pensar en Chávez o Maduro como “jodidos imbéciles” como afirma Hausmann. De hecho, hace que Hausmann y su padre se vean como los parásitos colonos y “jodidos imbéciles” que realmente son.